Auditoría SEO: cómo evaluar el estado SEO de una web
Toda estrategia centrada en el posicionamiento SEO requiere de una comprobación inicial con la que ser capaz de identificar y posteriormente optimizar todos y cada uno de los aspectos mejorables en nuestro sitio web, y es aquí donde entra en escena la auditoría SEO.
Algo que todos tenemos claro es que a nuestro automóvil se le debe realizar una puesta a punto en el taller, con el fin de identificar y solucionar problemas antes de que todo se descontrole, a la vez que garantizamos el máximo rendimiento del mismo.
Pues con el posicionamiento web pasa exactamente lo mismo… y es que toda estrategia SEO precisa de una puesta a punto para así ser capaz de competir en plenas facultades.
A esta puesta a punto se le denomina auditoría SEO, y en el artículo de hoy estudiaremos detenidamente todo lo relacionado con su proceso y ejecución. Si deseas saber más sobre cómo mejorar la optimización de tu web con el objetivo de ser capaz de competir por los primeros resultados de búsqueda, esta es tu guía.
Indice de Contenido
Cómo realizar una Auditoría SEO paso a paso
Ya sabemos tanto el qué es una auditoría SEO, como el porqué la necesito y hasta el para qué la queremos llevar a cabo… Así que es la hora de entrar en materia y ver la manera adecuada de realizar una auditoría SEO paso a paso.
El análisis de los factores que afectan al posicionamiento se divide en cinco categorías:
Paso 1: Indexabilidad y Rastreo
Indexabilidad
El primer punto es de gran importancia, ya que cuando hablamos de indexabilidad de una página web nos referimos a la facilidad con la que los motores de búsqueda la encuentran, para a continuación rastrear sus contenidos y, finalmente, indexarlos.
Es fundamental que todas las URLs que aporten valor al SEO de nuestro sitio web estén indexadas. Nos referimos claro a aquellas páginas que han sido optimizadas para aparecer en las SERPs con unas keywords determinadas, así como aquellas páginas que poseen una intención de búsqueda alta.
Esto no quiere decir que cuantas más páginas estén indexadas, mejor será para el sitio web. Y es que si hay algo tan importante como tener indexadas las URLs más relevantes de nuestra web, es no indexar las páginas que no estén optimizadas para el posicionamiento SEO y que, a fin de cuentas, no son relevantes para nuestra web.
Un ejemplo de URL no relevante sería aquella que contiene un contenido duplicado con otra URL de nuestro sitio web, pero no es el único caso. Desde páginas con thin content (contenido pobre o redundante), hasta aquellas que no aportan nada a la intención de búsqueda que busca la web. También quedan incluidas en este grupo aquellas URLs que no han sido optimizadas para el posicionamiento SEO, sea por la razón que sea.
Por otro lado tenemos lo que se conoce como rastreo de una web, que es el proceso mediante el cual los motores de búsqueda como Google realizan para estructurar un sitio web mediante robots que visitan cada rincón de la web en busca de enlaces a otras páginas de la misma web y cualquier actualización en la misma, con el fin de crear o modificar el índice del sitio web rastreado.
Si dispones de un sitio web grande, debes saber que por ejemplo Google, que es el motor de búsqueda más avanzado hoy día, puede empezar a tener problemas de indexación a partir de las 10.000 URLs, ya que aunque es todo un gigante, hasta Google dispone de un presupuesto limitado de rastreo, algo que se conoce como Crawl Budget.
¿Por qué mi URL no está indexada?
Existen diferentes motivos por los que nuestra URL podría no estar indexada:
- Etiqueta noindex: Con esta etiqueta la URL será rastreada pero no indexada por los robots de búsqueda. Puede incluirse dentro del código o puede hacerse mediante plugins en las diferentes plataformas como por ejemplo WordPress.
- Disallow en robots.txt: A través de esta orden podremos indicar a los motores de búsqueda aquellas URLs que no deseamos que sean rastreadas por los robots del buscador. Siempre que no les llegue ningún enlace de otra página, la página que contenga la orden Disallow no será indexada.
- Thin Content y contenido duplicado: En caso de que el buscador encuentre contenidos que considera irrelevantes o que están duplicados varias veces dentro de una misma web, es posible que el propio motor de búsqueda decida no indexar esas páginas, incluso si no hemos incluido ninguna orden como las vistas en los dos puntos anteriores.
- URLs huérfanas: Si una página no recibe ningún enlace interno, es posible que los robots de los motores de búsqueda se la salten, ya que como se citó anteriormente, se mueven a través de los enlaces. No tiene porqué ocurrir siempre, pero la mejor forma de evitarlo es enlazar de forma interna aquellas URLs que deseamos indexar y, posteriormente, posicionar.
- Crawl Budget: Si tu sitio web dispone de más de 10.000 URLs estarás superando el presupuesto de rastreo de Google. Para otros buscadores esta cifra baja de forma radical, por lo que si te importan más buscadores además de Google, te recomiendo que tu sitio web no exceda de las 1.000 URLs.
- Baja velocidad de carga: Aquellas Urls que dispongan de una velocidad de carga lenta o que experimente algún tipo de problema técnico no serán rastreadas de forma correcta por los motores de búsqueda.
- Sitemap: Más adelante veremos todo lo relativo al sitemap de una web, de momento basta con saber que aquellos sitios web que carecen de sitemap corren el riesgo de no ser indexados como deberían.
Hasta aquí las diferentes razones por las que una URL puede no estar indexada. Tal como puedes ver, son muchas y muy diversas, y por desgracia es muy común encontrarse con casos en los que el administrador se creía que todo estaba correctamente indexado cuando en realidad no era así.
Cuando realicemos una auditoría SEO en nuestra web, analizar y solucionar todo lo relativo a la indexación debe ser una de las primeras cosas que hagamos, ya que un error aquí puede arrastrarse si no se le pone coto rápidamente.
¿Cómo saber el estado de indexación de una página web?
Podremos consultar tanto las URLs indexadas como las que no lo han sido, a través de Search Console, en la pestaña de “Cobertura”.
Ve al apartado de “URLs válidas” para consultar cuáles están ya indexadas en Google. Aquí puede que veas algunas URLs con una advertencia, esto significa que esa URL es válida, pero que antes de indexarse debe solucionarse el motivo de la advertencia por parte de Google.
A la izquierda tenemos el apartado de Error, donde se incluyen las URLs que no han sido indexadas ya sea por problemas de indexación o porque se les incluyó la etiqueta “noindex”.
Otro método con el que podremos consultar si una URL está indexada es a través del propio buscador poniendo el siguiente comando en el campo de búsqueda “site:dominio”.
No es tan detallado ni organizado como Search Console, pero puede servirnos para hacer una consulta rápida y así saber qué URLs están indexadas.
Por último, existen herramientas de pago que dan un muy buen rendimiento a la hora de realizar una auditoría SEO. Un ejemplo es Screaming Frog, el cual es capaz de aportarnos información valiosa del apartado técnico de nuestra web.
Robots
Como ya hemos visto anteriormente en el artículo, el archivo robots.txt nos sirve para decir a los buscadores qué URLs deben ser rastreadas y cuales no a través de la orden “Disallow” e incluyendo la URL que deseamos dejar fuera del rastreo. También existe la orden “Allow”, que se usa sobretodo como excepción para una URL con el comando “Disallow” incluido.
Además, a través del archivo robots podremos especificar dónde se encuentra el sitemap, con el fin de dar facilidades a los motores de búsqueda.
Para realizar la auditoría SEO de nuestra web, es importante comprobar que en efecto disponemos de un archivo robots correctamente configurado y que se ajuste a las necesidades de la web.
¿Cómo ver el archivo robots.txt de cualquier web?
En el campo de la URL, sólo tendremos que añadir “robots.txt” al dominio que queramos analizar. Se trata de un archivo público que, tanto el buscador como los usuarios de cualquier parte del mundo, pueden ver y analizar incluso sin accesos de ningún tipo para esa web.
Sitemap
Nuestro siguiente paso es el análisis de nuestra web con el fin de encontrar conflictos o errores internos que puedan lastrar nuestro rendimiento y, a su vez, afectar a la calidad de la experiencia de usuario en la página.
Para llevar a cabo esta comprobación debemos fijarnos en nuestro sitemap, el cual debe ser verificado regularmente para evitar que se rastreen e indexen URLs indeseables.
Para ver el archivo del sitemap bastará con que acceder a la URL “dominio/sitemap_index.xml” y ya podremos consultar el índice de todos los sitemaps que haya en el dominio.
Para la verificación del sitemap existen varios métodos y multitud de herramientas que nos pueden ser de ayuda. Las más comunes son:
- Utilizar Google con el fin de ver todas las páginas activas en las que se pueden realizar búsquedas. Esto es muy útil en trabajos de alto nivel, investigaciones y en referencias de contenido temático, pero no nos dará un desglose completo de nuestro sitio web.
- Extraer manualmente el sitemap.xml para ver el mapa del sitio tal como lo hacen los buscadores.
- Extraer el sitemap.xml utilizando un rastreador de sitios web como SEO Spider, el cual nos permite rastrear hasta 500 URLs de forma gratuita.
El sitemap debe contener todas las URLs relevantes que se desean indexar, mientras que aquellas que se consideran irrelevantes o que ofrecen contenidos pobres, deben quedar fuera.
Es importante que el índice del sitemap para los motores de búsqueda esté bien estructurado, de tal manera que se facilite el trabajo de rastreo por parte de los robots de búsqueda. Este índice puede estar clasificado de diferentes maneras, ya sea por los diferentes tipos de contenido, por URLs prioritarias, por fechas, e incluso por productos y/o servicios.
A la hora de revisar el sitemap durante una auditoría SEO, debemos asegurarnos de que este sea entendible para los motores de búsqueda y, sobretodo, que no haya ningún error en el propio listado, del tipo dejar fuera del índice alguna URL relevante o al revés, alguna URL irrelevante que se ha colado cuando no debería.
Paso 2: Contenido, Keywords y CTR.
Una vez completado todo lo relativo a la indexación y el rastreo durante la realización de una auditoría SEO, es hora de ir al segundo paso y analizar lo concerniente a los contenidos, las keywords y el CTR o tasa de clics.
Contenido
El contenido es, sin lugar a dudas, uno de los puntos a analizar de mayor importancia durante una auditoría SEO, y es que es importante saber cómo detectar posibles errores y tener todos nuestros contenidos optimizados al máximo.
Sin embargo, son muchos los aspectos a tener en cuenta a la hora de definir la calidad de un contenido, por lo que puede hacerse un poco confuso si no se realiza el análisis de forma organizada.
Los factores que considero más importantes de cara al posicionamiento SEO son:
Contenido de Valor
Se considera contenido de valor a todo aquel que de verdad aporta beneficios al público objetivo al que va dirigido. O dicho de otro modo, el valor de un contenido viene determinado por la satisfacción del cliente con el mismo.
Como es lógico, cuanta mayor sea la satisfacción de los usuarios con tus contenidos, más probable será que estos realicen acciones beneficiosas para el posicionamiento SEO de nuestro sitio web. Puede ser desde compartir los contenidos en las redes sociales, hasta crear enlaces de manera natural, e incluso el solo hecho de permanecer en la web y acceder a otras páginas de nuestro dominio.
Cierto es que se trata de un aspecto difícil de medir, ya que no existe ninguna herramienta que sea capaz de medir a día de hoy el valor de una URL. Sin embargo, si es posible hacernos una idea clara al analizar diferentes factores durante la auditoría SEO, tales como el tiempo de permanencia en la web, la tasa de rebote, el número de enlaces o los comentarios realizados por los usuarios.
Retención de la audiencia, permanencia y fidelización
Aquí es donde medimos tanto el grado de interés, como la satisfacción de los clientes tras acceder a uno de nuestros contenidos. El objetivo siempre debe ser que los usuarios permanezcan el mayor tiempo posible en nuestra web, ya que una baja tasa de rebote es el mejor indicio de que realmente estamos aportando contenidos que los usuarios valoran.
Durante la auditoría SEO, recomiendo usar Google Analytics con el fin de analizar el nivel de optimización de la retención, la permanencia y la fidelización. Con esta herramienta de Google podremos consultar datos de gran importancia como son el tiempo de permanencia, la tasa de rebote y muchos más datos de utilidad.
Escaneabilidad
La escaneabilidad trata sobre la calidad del contenido durante una lectura rápida, el cual debe aportar una idea clara acerca de lo que trata y hacer ver a los usuarios aquellas partes que son más valiosas de nuestro contenido.
Para optimizarla, debemos incluir en los contenidos elementos visibles que destaquen sobre el resto y así atraer la atención de los usuarios para que puedan hacerse una idea rápida de lo que van a encontrar en ese contenido si deciden leerlo del todo.
Contenido duplicado
Es absolutamente fundamental que nos aseguremos de que todos nuestros contenidos no estén duplicados, tanto dentro de nuestra propia web, como desde otros sitios web externos.
Esto se debe a que Google penaliza gravemente todos los contenidos que considera duplicados, por lo que en caso de disponer de alguno, es mejor no indexarlo.
El problema viene cuando el contenido duplicado se crea de forma involuntaria, y es que son varias las razones por las que puedes encontrarte con un contenido considerado duplicado en tu sitio web que no esperabas:
- Falta de redirección a las diferentes versiones del dominio (“http o https”, “con o sin www”…)
- Paginaciones automáticas que no caben en una sola página y se dividen en secuencias.
- Páginas con URLs que contengan criterios temáticos como pueden ser las páginas de categoría.
Para comprobar si existe contenido duplicado, existen varias herramientas tanto gratuitas como de pago que pueden realizar el análisis y decirnos con precisión tanto si existe contenido duplicado, como dónde está y qué porcentaje de plagio conlleva.
Canibalización
La canibalización de keywords se produce cuando se tiene más de una URL apuntando hacia la misma keyword. Esto puede ser un problema si no se le pone solución, ya que ni Google ni prácticamente ningún buscador es capaz de saber cuál es la URL que debe posicionar en caso de haber dos páginas de una misma web apuntando a la misma palabra clave, lo cual resulta en que ninguna de las dos sea posicionada.
Recuerda que siempre debes crear tus URLs con una intención de búsqueda para cada una de ellas. Para localizar posibles canibalizaciones existen varios métodos, bien usando herramientas externas como Sistrix, o bien a través del Search Console de Google, o simplemente a través del comando “site:”.
Optimización del contenido
Otro aspecto donde toda auditoría SEO precisa de revisión es el correcto uso de las metaetiquetas (títle, metadescripciones, h1, h2, meta tags…).
Es fundamental que mantengamos una buena estructura de la información mediante encabezados adecuados a nuestro proyecto, mientras mantenemos a la vez una buena estructuración de los contenidos ya expuestos.
Durante la auditoría SEO revisaremos:
- Evitar tener más de una etiqueta h1 en cada una de nuestras páginas.
- Asegurarnos de que cada h1 se relacione con los términos que deseamos posicionar.
- Un correcto uso de las etiquetas h2 y h3 para dividir entre diferentes temáticas.
- Que nuestras metaetiquetas estén orientadas hacia el posicionamiento long tail.
Arquitectura
No es ningún secreto que disponer de una arquitectura bien diseñada repercute directamente en la calidad tanto del rastreo como de la indexación de nuestra página web. Y es que una organización clara mejorará en gran medida la navegabilidad de nuestra página y, a su vez, permitirá al usuario encontrar lo que necesita.
Si vale pero… ¿cómo logro mejorarla?
Muy fácil, centrando la estructura de tu web tanto en la experiencia de usuario como en el enlazado interno.
Procura disminuir lo más posible la profundidad de tu web, la cual se mide por el número de clics necesarios para llegar a tu destino desde tu página principal, lo cual se lleva a cabo a través de tu estructura de enlaces internos. No olvides comprobar que en efecto tu página principal esté conectada con las páginas más relevantes de tu web a través de estos links, que por lo general están siempre en la cabecera; y a su vez, verifica que estas páginas estén a su vez conectadas con otras más secundarias, y así hasta llegar al fondo.
Otro aspecto a tener en cuenta en la arquitectura web es la verificación de los códigos de estado de tus URL a través de herramientas externas como Ahrefs o Screaming Frog.
Ten presente que un código de estado viene a ser la respuesta estándar que nos proporciona un servidor ante una petición de un cliente cualquiera. Si por ejemplo recibimos un código 200 querrá decir que vamos por el buen camino, ya que esto significa que la petición ha sido procesada correctamente y que puede ser respondida sin problemas.
Sin embargo, si por el contrario recibimos un código 404 tendremos un problema, ya que es el código que especifica que una página ya no existe. Es fundamental crear redirecciones, ya sean permanentes (301) o temporales (302), dependiendo de cada caso.
Como puedes ver, el desarrollo web es una tarea compleja, por lo que recomiendo seguir siempre las instrucciones de un profesional del posicionamiento SEO para así evitar problemas en su creación que luego se arrastrarán y conllevarán gastos extra al administrador del sitio web.
Enlaces internos
Como ya sabemos, un enlace interno es un hipervínculo que enlaza dentro del propio dominio, o dicho de otra forma, un enlace que apunta a otra página en el mismo sitio web. Por otra parte, el anchor text es el título del enlace, en donde es visible el texto del hipervínculo.
Ni que decir tiene la importancia de su revisión, y es que saber analizar todos nuestros enlaces internos y anchor text es fundamental a la hora de realizar una auditoría SEO, dado su tremendo protagonismo cuando buscamos posicionar una web.
Existen algunas herramientas SEO que pueden serte de ayuda cuando realices el análisis, pero aquí veremos cómo llevarlo a cabo a través de Screaming Frog SEO:
- Lo primero es ejecutar un análisis completo de nuestra web, teniendo en cuenta que debemos configurar SEO Frog para que escanee únicamente URLs.
- A continuación debemos acceder al menú de la herramienta y pinchar en “Bulk Report” / “All Anchor Texts”, con el fin de descargarnos toda la información de nuestros anchor text.
- Una vez descargada la lista, la exportamos a Excel y la organizamos en columnas.
- Nuestro siguiente paso será seleccionar todas las filas y columnas para crear una tabla dinámica con las páginas de destino como filas y los anchor text dentro de las mismas.
- ¡Y listo! Una vez creado solo te queda revisar que no haya ningún error en tu estrategia de anchor text y palabras clave.
Páginas con error 404
Un página con un error 404 es una URL de nuestro sitio web que, por la razón que sea, no existe. Suele venir condicionado de un error en el texto de la URL de un enlace, por lo que es importante revisar todos nuestros enlaces internos para asegurarnos de que esto no ocurre.
En realidad, los errores 404 no afectan negativamente al SEO de un sitio web ya que ni penalizan ni suelen generar problemas de rastreo por parte de los motores de búsqueda.
También es común encontrarse con el error 404 a consecuencia de cambios en las URL o borrado de las mismas, puesto que si estaban enlazadas previamente, esos enlaces pasarán a ser 404 en cuanto ser realicen los cambios en la URL.
Sin embargo, nada de esto tiene porqué ser importante ya que podremos solucionar estos problemas de una manera muy sencilla, que es creando redirecciones 301 desde las URLs que den error 404, hasta las que deseamos que apunten los enlaces.
Recuerda, no hace falta redireccionar todas y cada una de las páginas 404, solo aquellas que son realmente relevantes para tu sitio web.
Si deseas consultar los errores 404 de un sitio web, puedes hacer uso de herramientas de análisis que ya hemos citado anteriormente, como son Screaming Frog y Ahrefs si deseamos una herramienta de pago, o con Search Console si lo que buscamos es una herramienta gratuita.
Enlaces salientes rotos
Los enlaces salientes aportan un gran valor a nuestro sitio web si son usados de manera correcta. Y es que enlazar a webs relevantes y con una temática similar a la nuestra es algo que Google valora mucho, ya que le ayuda a rastrear la web y además aporta un valor adicional al usuario.
Pero por otro lado, tener enlaces salientes rotos en nuestro sitio web es perjudicial ya que puede romper la satisfacción del cliente y es algo que no está bien visto por los motores de búsqueda como Google.
Es por esta razón que los enlaces salientes deben ser analizados durante una auditoría SEO, ya que cualquier cambio en la web de destino puede afectarnos negativamente.
Para detectar estos enlaces rotos, recomiendo la herramienta Screaming Frog, aunque existen algunas opciones gratuitas como el CheckBot de Chrome.
Redirecciones
Durante nuestra auditoría SEO es importante pararse a analizar las redirecciones que tenemos implementadas en el sitio web, ya sea a nivel de dominio, con redirecciones que llevan desde un dominio antiguo a uno nuevo, o a nivel de URLs únicas, como páginas que ya no existen.
Las redirecciones que más se ven suelen ser las 301 que son permanentes, y las 302 que son temporales. Su principal función es la de redirigir a los usuarios de dominios o páginas que ya no están en uso, hacia aquellas que si son actuales y están indexadas en los motores de búsqueda. Pero no es la única, ya que un redireccionamiento también traspasa autoridad desde el emisor hasta el receptor de la misma.
Un consejo para las redirecciones es que siempre que sea posible se realicen a través del archivo “htaccess” del mismo servidor, ya que consumen menos recursos que otras redirecciones realizadas en HTML o con Javascript.
Estructura URLs
Uno de los primeros aspectos a los que debes prestar atención durante tu auditoría SEO es la estructura de tus URLs. Y es que es muy común que nos asalten dudas sobre si la estructura inicial sigue hoy día siendo la más conveniente.
Antes de continuar, veamos un ejemplo que nos aclare cómo es la estructura de una URL completa:
Ahora que ya tenemos claro lo que es la estructura de una URL, vayamos al grano y echemos un vistazo a algunos consejos útiles para optimizar las nuestras:
- URLs concisas: Procura siempre resumir al máximo tus URL y aprovecha su espacio al máximo como por ejemplo no usando preposiciones. Ten siempre presente que ni a los usuarios ni a los buscadores les gustan las URLs largas.
- Keywords: Si has usado palabras clave en tus URLs, es importante que te asegures de que su aspecto sea natural, sin acaparar todo su espacio. Además, ten presente que Google y la mayoría de buscadores tienden a dar más importancia al comienzo que al final de la URL, por lo que lo apropiado es incluir la keyword al principio siempre que, como decíamos, sean naturales.
- Caracteres especiales: Durante la auditoría SEO debemos revisar nuestras URLs en busca de cualquier error, y uno de los más comunes es la utilización de guiones bajos (agencia_digital) para separar las palabras que la componen, cuando siempre debe usarse el guión alto (agencia-digital). También hay que estar atento de que no se haya colado ningún carácter especial como lo son las tildes, los símbolos de interrogación y/o exclamación, e incluso la letra “ñ” que aún hoy día sigue dando mucha guerra.
- Subcarpetas: ¿Dónde tienes alojadas tus páginas secundarias? ¿Usas subdominios (www.blog.ejemplo.com) o subcarpetas (www.ejemplo/blog)? Si por ejemplo disponemos de un blog con buen contenido y en el que se publica habitualmente, nuestra mejor opción es alojar el blog en una subcarpeta, ya que así nuestro dominio principal se verá beneficiado de los contenidos del blog.
- Quitar los parámetros: Algo muy común y con difícil solución una vez se ha implementado, es la inclusión de parámetros en las URLs (www.coches.com/marca=bmw&color=negro&ruedas=duras). Suele darse en tiendas online, y puede ser especialmente perjudicial si se dispone de un gran número de productos, ya que cambiarlo a posteriori puede ser un verdadero incordio. Hay dos formas de llevar a cabo la auditoría SEO en este campo: podemos usar la etiqueta canonical para indicar a Google que tenga en cuenta la URL del producto original, o podemos usar Webmaster Tools de Google y cambiarlo en Rastreo -> Parámetros de URL.
Imágenes
Debemos asegurarnos de que nuestras imágenes estén optimizadas para el SEO, lo cual se determina en base a tres factores: su tamaño, su peso y su relación con el contenido que ofrece esa página.
Un error muy común es el de no incluir ni la etiqueta “alt” ni el título a cada una de las imágenes de nuestra web.
Las etiquetas “alt” son usadas en las imágenes como un texto alternativo para que, cuando la imagen falla por la razón que sea, aún pueda verse la descripción de la misma.
Por otra parte, tanto Google como los demás buscadores usan las etiquetas “alt” y los títulos como seña de identidad para identificar cada imagen. Sin esta etiqueta y sin los títulos de las imágenes, Google sería incapaz de saber de que va y trata cada imagen.
Pero los “alt” no son lo único a tener en cuenta, como ya hemos comentado antes, tanto el peso como el tamaño también influyen. Por una parte, debemos procurar agilizar el peso de nuestras imágenes lo máximo posible, y por otra, no debemos exceder de un tamaño superior a los 300×300 píxeles.
Para monitorear y analizar las imágenes de nuestro sitio web, recomiendo de nuevo la herramienta Screaming Frog o Ahrefs, ambos capaces de analizar el nivel de optimización de todas las imágenes de un sitio web.
Keywords
Toda estrategia de posicionamiento SEO debe girar en torno a las keywords, y es que si gastamos nuestros esfuerzos en potenciar keywords que en realidad sean irrelevantes para nuestra temática o que sencillamente son demasiado difíciles de posicionar, estaremos gastando tiempo y recursos que podrían ser aprovechados para aquellas keywords que si aportan un valor real al SEO de nuestro sitio web.
Es por ello que antes de desarrollar nuestro estrategia de contenidos, es imperativo que se realice un Keyword Research para así obtener las keywords que mejor se ajustarán a ellos. Una vez dispongamos de las keywords adecuadas, elaboraremos nuestra estrategia de contenidos con artículos relacionados con las mismas.
Ten en cuenta que cada URL que esté indexada debe sustentar una keyword o intención de búsqueda diferente para así evitar la canibalización.
A continuación veremos algunos consejos con los que optimizar nuestras keywords con el objetivo de mejorar nuestro SEO:
- Procura ser natural en tus contenidos, no incrustes tus keywords de mala manera ni las repitas sin venir a cuento.
- Haz que tus keywords tengan la densidad apropiada usándola allí donde sea relevante, como pueden ser el título, los anchor text de los enlaces, al comienzo de los artículos, etcétera.
- La extensión de tus contenidos debe corresponderse con la información que estamos aportando. Lo mínimo suelen ser unas 300 palabras, pero en caso de ser un contenido enfocado a un guía por ejemplo, pueden perfectamente subir hasta las 5.000 palabras.
- Haz uso de sinónimos de la keyword a trabajar en cada contenido, ya que a menudo compartirán una misma intención de búsqueda y, aunque parezca que no tienen tanto volumen de búsqueda como la keyword principal, si pueden sumar valor al SEO de nuestra web.
CTR
El porcentaje de clics o CTR son los clics que se obtienen desde Google respecto al total de impresiones que he recibido en el motor de búsqueda.
Se trata de un factor de gran importancia que afecta al posicionamiento SEO, por lo que debe ser analizado durante nuestra auditoría SEO. Si tu sitio web tiene un bajo CRT, es probable que debas pararte a analizar tus títulos y metadescripciones para averiguar si en efecto resultan atractivos para los usuarios.
Ya que el CTR es un factor pilar en la valoración SEO de una web, puede merecer la pena desarrollar diferentes estrategias con el objetivo de optimizarlo todo lo que sea posible.
A continuación veremos algunos consejos con los que optimizar nuestro CTR:
- Haz uso de títulos y metadescripciones que atraigan a los usuarios.
- Puedes incluir emojis y caracteres especiales en los títulos y metadescripciones para darles una mayor visibilidad.
- Usa Rich Snippets (elementos enriquecidos) siempre que sea posible, para así ofrecer un contenido más especializado a los usuarios.
- Omite las fechas en aquellos contenidos que puedan parecer obsoletos sin estarlo realmente.
- Revisa las SERPs de la competencia en busca de estrategias beneficiosas que puedas aprovechar para tu sitio web.
- No ignores tu imagen de marca. Esto es algo que al principio no parece necesario, pero que una vez empieza a rodar puede aportarnos un gran valor al prestigio de nuestra web.
Si deseas analizar tu CTR, con Search Console podrás hacerlo en todas las URL de tu sitio web.
Paso 3: Enlaces entrantes y Autoridad de dominio
Una vez terminadas las fases de indexabilidad y de rastreo, así como de análisis del contenido, las keywords y el CTR, es hora de centrarnos en el análisis de los enlaces internos (backlinks) y en la autoridad de nuestro dominio.
Backlinks
Los backlinks o enlaces entrantes siempre han sido un factor clave a la hora de posicionar nuestro sitio web, y a día de hoy siguen siéndolo.
Como ya sabrás, los backlinks son aquellos enlaces que apuntan a nuestra web desde otros dominios diferentes. Estos enlaces lo que hacen es traspasar autoridad de un dominio a otro, por lo que cuantos más enlaces entrantes tengamos que se ajusten a los términos de Google, mejor para nosotros.
Entre los factores que Google tiene en cuenta, requiere especial atención que sean Follow, que el enlace tenga una apariencia natural y que ambas webs sean relevantes la una con la otra.
Dada su importancia, es lógico que debamos mantener un control sobre nuestro perfil de enlaces entrantes, para así ser capaces de evaluar la calidad de los mismos. Y es que si disponemos de un perfil de backlinks que Google considere tóxico, no solo no estaremos ayudando a mejorar el posicionamiento web de nuestra página, sino que la estaremos perjudicando en gran medida.
Puedes acceder a un listado de tus enlaces entrantes a través de Seach Console, aunque personalmente prefiero una herramienta de pago como es Ahrefs ya que ofrece mucha más información de calidad sobre nuestros enlaces que con la herramienta de Google.
Autoridad de dominio
Cuando hablamos de la autoridad del dominio o DA (Domain Authority) debemos saber que se trata de un indicador que mide la relevancia o popularidad que tiene nuestra web en comparación con todas las demás. Su puntuación oscila entre 0 y 100, siendo 100 la más elevada, aunque ya te aviso que llegar a las puntuaciones más elevadas es complicado. Obviamente, cuanto más alto sea tu autoridad de dominio, más fácil te resultará posicionar la página.
Al tratarse de un sistema de puntuación dinámico, es necesario llevar un control del mismo, y no hay mejor momento para llevarlo a cabo que durante una auditoría SEO.
Ten en cuenta que si eres propietario de un sitio web nuevo o si tu web es muy pequeña, tu capacidad para subir tu puntuación DA estará muy mermada. Y es que aunque suene injusto, así es como a día de hoy funcionan todos los buscadores… Cuanta más antigüedad y relevancia tenga una web, mayor será tu autoridad de dominio.
Además de la autoridad del dominio (DA), puedes consultar la autoridad de cada una de tus páginas (PA), lo que te ayudará a hacerte una idea sobre cuales de tus páginas tienen mayor relevancia en tu web.
Durante la auditoría comprueba tanto tu DA como el PA de tus páginas. Lo normal es que tus valores vayan subiendo a un ritmo lento, pero si durante la revisión ves que alguno ha bajado, es probable que se deba a algún tipo de conflicto, ya sea contenido duplicado, ser catalogado como spam por los buscadores, problemas de canibalización, etcétera.
Paso 4: Rendimiento, Adaptabilidad y Usabilidad
Durante el paso 4 revisaremos todo lo relacionado con el rendimiento y la velocidad de nuestro sitio web, lo cual es conocido como WPO (Web Performance optimization). También nos pararemos a analizar la adaptabilidad que nuestra web tiene con los diferentes dispositivos, algo que se conoce como diseño responsive. Por último, veremos todo lo necesario sobre la experiencia de usuario y la usabilidad misma de nuestro sitio web.
Rendimiento y velocidad de carga
La velocidad a la que nuestra web carga todos sus contenidos es uno de los aspectos más importantes a la hora de posicionarnos en los motores de búsqueda, y como no podía ser menos, un paso crucial en toda auditoría SEO.
Ten en cuenta que más del 50% de las búsquedas realizadas son desde dispositivos móviles, las cuales solo muestran en sus resultados aquellas webs que estén optimizadas para ello, siendo la velocidad de carga el principal factor a tener en cuenta.
A día de hoy la cruda realidad es que si tu sitio web no está optimizado para su uso en dispositivos móviles, es más que probable que nunca logres llegar a las primeras posiciones en las páginas de resultados (SERPs). Una regla no escrita dicta que si tu web tarda en cargar más de 3 segundos, lo más probable es que el usuario pierda el interés y abandone tu página antes incluso de ver tu contenido.
Si durante la auditoría ves necesario mejorar la velocidad de carga de tu web, te recomiendo que eches un vistazo a PageSpeed insights, donde podrás descubrir todas las posibles mejoras para tu sitio web.
En resumen, trata de que tu sitio web cargue lo más rápido posible en todos los dispositivos disponibles. Entre los factores que influyen en la velocidad de carga de una web podemos encontrar:
- Plantillas y Plugins: En caso de estar usando un CMS como por ejemplo puede ser WordPress, deberemos prestar también atención a la plantilla que queremos usar, además de los plugins que añadiremos a la web con el objetivo de obtener nuevas funcionalidades. Si disponemos de una plantilla demasiado pesada, esta será lenta y podría complicar la optimización de la velocidad de carga que, como ya hemos visto, es de vital importancia. Haz uso solo de los plugins que realmente sean necesarios y procuro seleccionar la plantilla más simple pero a la vez atractiva que puedas.
- Cuanto menos código, mejor: Procura reducir la cantidad de código en tu sitio web a través de depuraciones para eliminar todo aquel código que veas innecesario. También es bueno que se realice una concatenación de líneas de código para agilizar su lectura.
- Las imágenes: Un error común es incluir imágenes demasiado pesadas en nuestro sitio web, lo que repercute en su velocidad de carga. Esto puede solucionarse en la mayoría de los casos prestando atención al tamaño y al peso de las imágenes y procurando optimizarlas siempre que sea posible.
- El Hosting: No todos los servidores son igual de rápidos ni se adaptan de la misma manera a diferentes tipos de webs, por lo que es importante alojar nuestra web en un hosting compatible con tu CMS que sea seguro y disponga de un buen rendimiento. También el soporte es algo a tener en cuenta. El solo hecho de cambiar tu hosting, de uno regular a otro especializado, puede hacer que la velocidad de carga de tu sitio web aumente drásticamente.
- Optimizando la base de datos: Es recomendable limpiar frecuentemente todas las tablas y los contenidos que consideremos inservibles o que ya no sean tan útiles por el pasar del tiempo. Con ello agilizaremos todas las consultas que se realizan desde la página web, mejorando la velocidad de carga durante el proceso. Algo común es encontrar tablas que desconocías su existencia que están ahí por culpa de algún plugin previamente desinstalado. Por eso no hay que confiarse y revisarla periódicamente durante nuestra auditoría SEO.
- La caché: A través de ciertos plugins como por ejemplo WP Rocket, podremos instalar en nuestra web un sistema de caché que hará que los elementos estáticos se sirvan más rápido gracias a que ya estarán precargados. Esto mejora en gran medida el rendimiento y la velocidad de carga de una web, lo que hace de la instalación de un sistema de caché uno de los procesos que mejor resultado nos puede dar.
- Haz uso de una CDN: Con una red de distribución de contenido (CDN) optimizaremos la entrega de datos desde nuestro sitio web hasta el usuario. Esto lo logra por medio de centros de datos que están repartidos por todo el globo y de un montón de mejoras para optimizar tanto la velocidad de carga como la fluidez de respuesta de nuestro servidor.
- Carga asíncrona: Podemos hacer que algunos de los elementos de la página se carguen un poco más tarde que el resto. Esto resulta especialmente útil con aquellos elementos que, aunque necesarios, son muy pesados, permitiéndonos escalar la velocidad de carga de la web, lo que agiliza el proceso. Del mismo modo podemos hacer que la carga de imágenes y vídeos no sea simultánea, sino progresiva, algo conocido como Lazy Load.
- Actualiza y revisa tu web siempre que puedas: Procura que todo funcione como debe a través de tareas de actualización y de optimización tanto en tu CMS, como en tu lista de plugins y tu plantilla. Busca por si existe algún tipo de incompatibilidad entre dos o varios elementos de nuestro sitio web.
Adaptabilidad a diferentes dispositivos
Uno de los elementos que mayor importancia está adquiriendo a día de hoy en lo referente a los factores SEO que influyen en el posicionamiento de una página web, es que esta sea compatible con todos los diferentes dispositivos que existen, siendo los dispositivos móviles los que hacen de este factor algo tan importante de cara al SEO. A esto se le conoce como adaptabilidad responsive.
Durante nuestra auditoría SEO es importante que nos paremos a analizar si de verdad nuestra web es capaz de adaptarse a cada tamaño de pantalla y a cada dispositivo, ya sea desde un smartphone, desde una tablet o desde el escritorio de un ordenador.
Esto es algo que Google y cualquier motor de búsqueda que se precie tiene muy en cuenta, además de que cuanto mayor sea nuestra adaptabilidad responsive, mayor será la satisfacción de los usuarios.
Para comprobar durante nuestra auditoría SEO si nuestra página web es responsive podemos o bien monitorear la web en distintos dispositivos comprobando cómo se comporta en cada uno de ellos, o bien se puede hacer uso de aplicaciones externas capaces de simular las diferentes características de cada uno, como la marca, el modelo y los distintos tamaños de pantalla.
Usabilidad y la experiencia de usuario
Para terminar con el paso 4 de una auditoría SEO, abordaremos los conceptos de usabilidad y experiencia de usuario, los cuales a menudo se confunden cuando en realidad no son lo mismo exactamente.
Usabilidad
Por un lado tenemos la usabilidad de una web, que se refiere a aquellos sitios web a los que los usuarios acceden y saben cómo hacer uso de ella con la mayor facilidad posible sin necesidad de pararse a pensar para entender el funcionamiento de algún elemento de nuestra web.
Se considera que nuestra web es “usable” cuando esta resulta intuitiva y fácilmente accesible para los usuarios mediante el uso de textos con una tipografía y tamaño agradables, haciendo ver al usuario de qué trata la página elegida lo más rápidamente posible, y prescindiendo de elementos que puedan resultar invasivos como los pop-ups.
Experiencia de usuario
Después tenemos la mucho más conocida experiencia de usuario, que hace referencia al grado de satisfacción del usuario, condicionado por los factores previamente citados en la usabilidad.
Así que, por un lado tenemos las usabilidad, que es cómo la web facilita el uso de los usuarios, y por otro tenemos la experiencia de usuario, que se refiere a cuánto ha impactado la web a los usuarios.
Como es obvio, nuestro objetivo durante la auditoría SEO debe ser aportar una experiencia de usuario positiva a los usuarios, lo cual beneficia tanto a nuestra imagen de marca, como a las propias ventas y al posicionamiento SEO del sitio web.
Algunas de las estadísticas con los que hacernos una idea de si la experiencia de usuario en nuestra web es positiva para los usuarios son:
- Un mayor número de conversiones.
- Un baja tasa de rebote.
- Alto CTR.
- Altos tiempos de permanencia.
- Número de visitas a páginas internas por cada usuario.
- Gran número de enlaces naturales.
- Recibir más leads.
Durante la auditoría SEO, nuestro objetivo debe ser siempre que nuestra página web ofrezca una experiencia de usuario acorde a sus expectativas, que siempre son altas.
Paso 5: Código y Etiquetas
En la parte final de esta guía paso a paso para realizar una auditoría SEO veremos todo lo necesario sobre el que quizá sea el apartado más enrevesado de todos.
Hablamos claro está de los aspectos más técnicos del análisis a nivel de código, como por ejemplo los problemas derivados de la codificación en distintas lenguas o cualquier tipo de implementación en el código que pueda estar beneficiando o perjudicando el posicionamiento SEO de nuestra página web.
El correcto uso de las metaetiquetas (títle, metadescripciones, h1, h2, meta tags…) es un aspecto donde toda auditoría SEO precisa de revisión de vez en cuando.
Es fundamental que mantengamos una buena estructura de la información mediante encabezados adecuados a nuestro proyecto, mientras mantenemos a la vez una buena estructuración de los contenidos ya expuestos.
Durante la auditoría SEO revisaremos:
- Evitar tener más de una etiqueta h1 en cada una de nuestras páginas.
- Asegurarnos de que cada h1 se relacione con los términos que deseamos posicionar.
- Un correcto uso de las etiquetas h2 y h3 para dividir entre diferentes temáticas.
- Que nuestras metaetiquetas estén orientadas hacia el posicionamiento long tail.
A continuación veremos cada una de las etiquetas y atributos que son usados en HTML y que influyen en el SEO de nuestro sitio web:
- Etiqueta title <title></title>: Se trata de la etiqueta reina por excelencia, y debe contener la keyword que se desea posicionar. Por lo general coincide con el H1 pero no tiene porqué ser así siempre.
- Etiqueta metadescription <meta name=”description” content=””>: Con esta etiqueta definimos la descripción que aparecerá en la SERP de Google debajo de nuestro título. Aunque no influye directamente en el posicionamiento SEO, si que lo hace en el CTR, por lo que debe ser lo más específica y clara posible. Procura rellenar los 155 caracteres que permite siempre que puedas.
- Títulos <h> y encabezados <h1></h1>, <h2></h2>, <h3></h3>…: Las etiquetas para títulos como h1 o h2 cumplen dos funciones, ya que por una parte dan la estructura al propio contenido jerarquizando los epígrafes, y por otro los títulos h poseen una relevancia enorme en el posicionamiento web, sobretodo en los h1 y va bajando su importnacia según aumenta el número.
- Atributo alt y title en imágenes <img alt=”” title=””>: Gracias al atributo alt y al title en las imágenes podremos informar a Google de qué trata la imagen en cuestión. Como es lógico, los motores de búsqueda no ven las imágenes, por ello, se basan en estos dos códigos para “leer” las imágenes.
- Atributo lang <html rel=”alternate” hreflang=””>: Sirve para especificar el idioma en el que está sustentado el contenido y si una web está en varios idiomas, tendrá que hacer uso de ella para cada uno de ellos.
- Atributo hreflang <link rel=”alternate” hreflang=””>: Con el decimos al motor de búsqueda qué idiomas incluimos en nuestra web y dónde está cada uno, gracias a lo cual Google puede ver con extrema facilidad la estructura interna de cualquier web que tenga soporte para varios idiomas.
- Meta robots >meta name=”robots” content= “”/>: Gracias a los meta robots podremos decir a Google si una página en concreto de nuestra web debe ser indexada, o si por el contrario preferimos que no lo sea. Pueden usarse tanto el “follow-nofollow” como el “index-noindex” respectivamente.
- Etiqueta canonical <link rel=”canonical” href=”” />: La etiqueta canonical es usada comúnmente para indicar a los robots de búsqueda cuál es la URL canónica de la página que se muestra en ese momento.
- Title para enlaces <a href=”” title=””></a>: Con esta etiqueta podremos aportar valor adicional a nuestros enlaces complementando la información que encontrarán los usuarios si hacen clic en el. Esto es algo que Google también rastrea y tiene en cuenta, por lo que es recomendable usar las keyword que deseamos posicionar con ese contenido en los titles de nuestros enlaces internos.
¿Cómo revisar tus etiquetas de cara a la optimización SEO?
Existen multitud de herramientas con las que analizar y monitorear un sitio web para comprobar si las etiquetas y atributos usados son los correctos. De nuevo recomendaré las herramientas de Ahrefs y de Screaming Frog, pero por citar a otros y no quedarme siempre en los mismos incluiré a Woorank y TagInspector.
Si no puedes contar con ninguna de estas herramientas, siempre podrás hacer clic derecho sobre la página que desees ver y dar a “Inspeccionar”. De este modo puedes ver el código en formato puro, lo malo es que puede resultar tedioso si son muchas las páginas a revisar.
También es posible hacer clic derecho en la página y entrar en “Ver código fuente de la página”. Si estás más familiarizado con el código de programación, esta suele ser la opción elegida siempre que no se trate de grandes volúmenes de páginas por revisar.
Conclusión
Hasta aquí nuestra guía paso a paso para realizar una auditoría SEO. Espero que no se te haya hecho demasiado larga y recuerda, ante cualquier duda, no dudes en ponerte en contactarnos, estaremos encantados de aclarártela.
¿Qué herramientas usar en una Auditoría SEO?
Toca el turno de ver cuales son las herramientas que podemos usar a la hora de realizar nuestra auditoría SEO.
Lo primero que debemos saber es que, aunque son de gran ayuda, en realidad los datos que nos proporcionan estas herramientas a menudo deben ser revisados de forma natural, ya que es posible encontrar datos que la herramienta califique como error, cuando en realidad no lo es ya que forma parte de una estrategia previamente establecida.
Por tanto recuerda, todas las herramientas que nos ayudan a realizar una auditoría SEO sirven para consultar toda la información necesaria para llevar a cabo cada uno de los pasos necesarios, pero siempre debemos tener en cuenta que estos datos no son infalibles, por lo que antes de realizar grandes cambios porque la herramienta así te lo recomienda, asegúrate de que en efecto esos cambios son necesarios.
Veamos ahora algunas de las herramientas SEO más conocidas:
- Search Console: Se trata de un servicio gratuito que nos proporciona Google que nos facilitará la vida a la hora de supervisar, mantener y solucionar todos los problemas relacionados con la presentación de tu web en las SERPs. No caer en el error de pensar que es una herramienta obligatoria para ser indexado por Google, aunque si es cierto que Search Console nos da la capacidad de entender y mejorar la manera en que Google ve nuestro sitio web.
- Google Analytics: Otra herramienta gratuita de Google especializada en la analítica web. Se trata de la herramienta más usada a la hora de analizar todos los aspectos relacionados con tu sitio web, ya sea un blog, una tienda online, una web corporativa o lo que sea. Además es capaz de visualizar datos de gran utilidad como el tiempo que pasan los usuarios en tu web, de donde proceden, las acciones que realizan en tu web, los diferentes dispositivos que se han usado para entrar, si es un usuario nuevo o que ya nos ha visitado previamente, etcétera. Además, Google Analytics nos permite conocer cuáles son nuestras páginas más visitadas, las conversiones que se han hecho en tu web y mucho más…
- Ahrefs: Herramienta especializada en la monitorización de enlaces entrantes (backlinks) con gran fama en el sector gracias a su precisión y alta velocidad. Gracias a ella podremos descubrir los enlaces que se van creando hacia nuestro dominio o, si lo deseamos, conocer el volumen de enlaces entrantes de nuestra competencia, lo cual nos ayudará a entender mejor la estrategia de Linkbuilding que están llevando a cabo, además de darnos la posibilidad de encontrar nuevas fuentes de enlace óptimas.
- SEMRush: La herramienta SEMRush es usada principalmente para analizar todos los datos relacionados con el Posicionamiento SEO. Además es capaz de elaborar diferentes estrategias con las que obtener nuevos backlinks hacia nuestra web. También posee una herramienta muy útil a la hora de detectar y analizar a la competencia que nos hará la vida mucho más fácil.
- Sistrix: Esta herramienta de origen alemán especializada en la gestión SEO tanto OnPage como OffPage, es capaz de comprobar en segundos un gran volumen de información, creando reportes muy completos en donde se nos indica dónde está posicionada tu competencia y cómo hacer para igualarla.
- Screaming Frog: Se trata de una herramienta que nos permite rastrear cualquier sitio web actuando de la misma forma que lo hace una SEO Spider, de tal manera que es capaz de proporcionarnos un informe muy completo tanto de los enlaces , como de las imágenes, los archivos de código HTML, CSS, JavaScript o PHP, y en definitiva, toda la información que podamos necesitar a la hora de realizar una auditoría SEO.
- WooRank: WooRank es una aplicación web que se encarga de generar informes de cualquier sitio web en los que se incluyen todos los datos relevantes al estado de la misma, además de un listado de recomendaciones para implementar en la web con el objetivo de optimizar tanto su autoridad de dominio como su presencia online.
- MetricSpot: Otra herramienta que nos puede facilitar la vida durante una auditoría SEO es MetricSpot, la cual es capaz de generar informes completos de cualquier web, a la vez que mide el grado de optimización SEO del sitio web basándose en más de cincuenta parámetros diferentes que influyen a su posicionamiento. Su peculiaridad es que es capaz de analizar también tus redes sociales, lo cual ayuda a conocer su autoridad social y a encontrar Influencers de tu sector.
- SEOptimer: SEOptimer es una de las pocas herramientas gratuitas que de verdad es capaz de darnos buenos resultados a la hora de auditar nuestra web. Su proceso se diferencia mucho de otras herramientas SEO dado que se basa en el aislamiento de aquellas áreas que considera problemáticas, apartando todo lo que crea perjudicial.
- QuickSprout: Gracias a esta herramienta podremos realizar análisis técnicos tanto de nuestra web como de las de la competencia de forma rápida y eficaz. Además es capaz de crear comparativas de hasta tres sitios web diferentes, lo que nos permite tener un listado con todos los enlaces de la competencia.
- Seranking: Para terminar veremos SE Ranking, la cual es una de las herramientas “todo en uno” más usadas en el campo del posicionamiento SEO. Posee una base de datos con más de 68 millones de palabras clave, lo cual es una bestialidad. Está compuesto por un total de 35 funciones diferentes, las cuales nos permiten seguir la evolución de un dominio, conocer la posición exacta de las palabras clave que trabajamos, ver consejos sobre otras keywords que podrían añadirse a tu proyecto e investigar a la competencia de forma eficaz.
Auditorías SEO: Novedades y trasfondo
Ya casi estamos llegando al final, pero antes me gustaría comentar algo muy importante que por desgracia no siempre se tiene en cuenta.
El mundo del posicionamiento SEO es complejo y evoluciona cada día. Es por ello que para poder estar al día uno debe empaparse de todos los contenidos de calidad relacionados con el SEO, y las auditorías no son la excepción…
Ni os imagináis la cantidad de “profesionales SEO” que están estancados en técnicas obsoletas, preguntándose día si y día también el porqué lo que antes le servía, ahora le perjudica…
Mantente al día con contenidos de calidad y verás como todo acaba saliendo como tu quieres.
Hasta aquí nuestra guía con todo lo necesario para llevar a cabo una auditoría SEO. Espero que te haya quedado todo aclarado y recuerda, cualquier duda que tengas estaremos encantados de atenderte.